Murió trágicamente y joven, como lo han hecho, por desgracia, una gran cantidad de mitos y leyendas. Eso sí, dejándonos en nuestra retina una imagen: la de la estrella que no pudo eclipsar ni el que fuera por aquel entonces su marido, el chico de oro de la "aristocracia" estadounidense y hombre más guapo del mundo, John John Kennedy.
Su minimalismo, sus básicos, su eterno negro nunca pasarán de moda. Irrepetible Bessette.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.